Chile; los ex presos políticos y el rol de sus dirigentes

Escribir una leyenda

Nelson Agustín Aramburu Soto es el mejor ejemplo del trabajo sucio de los servicios de inteligencia.-

 

Armando Romero

 

Desde mi transitoria condición de dirigente, me significo conocer  diferentes realidades, de los compañeros ex presos políticos, compartir emotivos encuentros y las extensas reuniones de las directivas, de las organizaciones de ex PP.

Hay una cierta “profesionalización”  del cargo de dirigente,  que se mantienen en sus amañados cargos, llegando a crear orgánicas cual leyenda, para determinados fines personales  de “legitimarse”.

 

Con una habilidad para eludir las  acusaciones, que pesan en su contra, las cuales jamás han sido desmentidas…Aramburu de una inteligencia reconocida, ha sabido desviar la atención con destreza aprendida a lo largo de los años…

 

En anteriores escritos he señalado que reconozco mis errores, uno de ellos fue mi apoyo a Nelson. No pretendo  buscar justificación alguna…a mi llegada a la calle 2, de la ex Cárcel Pública en 1977, fue Aramburu quien me recibe ese día, una jarra de te, una paila de huevos fritos y pan amasado…un gesto que emotivamente me ha vinculado a su persona.

 

Desde mi perecedero cargo de dirigente, impulse una alianza amplia con el Comando Unitario, entendiendo que había un objetivo superior, que era la unidad de los ex PP. Estaba al tanto de las reuniones que sus dirigentes sostenían con el gobierno, por intermedio de Francisco Ugás…no me era desconocida ciertos hechos, de algunos de los compañeros del Comando Unitario.  

Quise creer en la condición de ex presos políticos, de sus dirigentes…me la jugué por la unidad en la acción. Con el pasar del tiempo, comienzo a comprender que esa unidad, es imposible con operadores políticos y personajes como Aramburu…

 

El abogado Víctor Rozas al respecto ha señalado. “Cuál es el objetivo que persigue Aramburu (y detrás de él el poder militar o “inteligencia”). Es mantener débil, sin una orientación común, manipulado para que nada se consiga en los Gobiernos y los ex prisioneros continúen sin indemnización del Estado, pobres o con muy escasos recursos, mientras los torturadores se mantienen en la mayor impunidad. Su trabajo es DIVIDIR mediante intrigas, alimentar el sectarismo, la desconfianza y la desesperanza. Eso lo ha conseguido y debe estar bien remunerado por todo eso.  Pero, como debieras saber, Aramburu no es un traidor ni un judas sino un individuo que tiene su origen en el movimiento Nazi, conocido como el “fürer” de las expropiaciones, uno de los primeros “asaltantes con Ideología” (como lo describe un interesante artículo de la revista “Ercilla” N°1862, semana del 24 al 30 de marzo de 1971).”

 

 Estas palabras han estado dando vuelta en mi  mente hace tiempo…me preguntaba como era posible, que su reconocido pasado nazi en Chile, hecho a lo que Allende se refirió extensamente el 16 de junio  de 1971…en la prisión política conocíamos estos antecedentes, así todo Nelson lograba dar vuelta las criticas y acusaciones en su contra.

 

Hoy el ejemplar de la revista Ercilla N°1862, no esta disponible en la hemeroteca, al igual que en los buscadores de internet, las acusaciones en contra de Aramburu han desaparecido.

Cual ha sido la vinculación con Francisco Ugás, ex Secretario Ejecutivo del Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior. Nombrado por Piñera y ratificado por Bachelet.  Hoy becado por el gobierno en España,  militante de Revolución Democrática…Aramburu y Ugás me descalificaron y lograron aislarme, como si fuese un potencial peligro.

Reconozco el aporte de Ugás en el tema de los Derechos Humanos…el punto es que en la denominada Mesa de Alto Nivel, desempeño a cabalidad su rol institucional…él pudo haber llevado a la practica,  aquello que en reuniones con ex PP afirmaba y se comprometía de palabras…creo que a lo menos da para pensar y analizar los hechos.

 

En los compañeros ex PP hay una urgente necesidad, que no siempre se ha visto reflejada en movilizaciones y participaciones…los sobrevivientes de la prisión política, para las agrupaciones de Derechos Humanos de Familiares, los ex PP parecen los parientes pobres.  En esta realidad los partidos políticos tienen directa responsabilidad.

Nelson Aramburu ha sabido posicionarse como “dirigente”, paseándose por Chile y en el exterior…con un aprendido discurso en defensa de los DD.HH y con recursos económicos, que lo han mantenido a lo largo del tiempo.

Lealmente he manifestado mis discrepancias con Aramburu, relacionado con su  trabajo político…otra cosa muy diferente es acusarlo sin pruebas concreta.

Lo que hay fue su identificación y activismo con grupos nazis,  el Presidente Allende lo menciona,  dentro del contexto político de la época, entre los grupos que buscaban desestabilizar el gobierno de la unidad popular.  

Tiene la pericia de abordaje y manipulación, en su denominada estrategia de “pinza”…su discurso público, dicta mucho en el día a día  en su que hacer…nunca ha dejado de ser un nazi en su pensamiento político interno.  

Aramburu ha sostenido reuniones privadas con el gobierno,  en representación del Comando Unitario…participo asesorando a Francisco Ugás, en el documento del acuerdo de Rancagua, que puso termino a la huelga de hambre de los ex PP el 2015. 

El ministro Fernández continua dilatando una respuesta a las demandas de los ex PP. Las movilizaciones han sido neutralizadas, la unidad de los ex presos políticos ha terminado ser, un anhelo  romántico e irreal…los personalismos de los “dirigentes” terminan por estar, por sobre  los intereses que nos unen…en esta crítica me incluyo, ya que no he estado a la altura, de lo que se espera de todo dirigente.